¿Qué calzado debo utilizar en el auto?

Cada vez que cambia la estación del año nosotros removemos el armario entero para adaptarnos a las nuevas tendencias y a las nuevas temperaturas. Nuestra indumentaria afecta indudablemente a la conducción y el verano es la estación en la que más irregularidades cometemos los conductores: conducir con chanclas o conducir con sandalias es demasiado habitual pero, ¿cuál es el mejor calzado en el auto?

Mejores zapatos para el coche

Calzado deportivo

Es el calzado más cómodo y flexible. La suela es fina en la mayoría de los casos. El calzado deportivo más recomendado son las zapatillas running, por su ligereza y flexibilidad.

Mocasines

Es evidente que hay muchos modelos de zapatos pero si hay unos que son especialmente cómodos para conducir esos son los mocasines. Estos zapatos nos permiten conducir de forma cómoda gracias a su flexibilidad. Además, nuestros músculos de los pies no se cansan. ¿Qué más se puede pedir?

Botines de conducción

Si son fans de la fórmula 1 saben de qué tipo de botines estamos hablando. Se trata de unos botines ideales para conducción deportiva o profesional. ¿Qué tienen de peculiar? Básicamente la sujeción del pie, el tacto y la precisión que permiten con los pedales.

Calzado en el auto: los no recomendados

Seguro que muchas veces han escuchado eso de “como mejor se conduce es descalzo”. Bueno, esta afirmación es totalmente falsa porque a pesar de que el tacto de los pedales es de 10, la sujeción del pie es inexistente. En caso de accidente, nuestros pies sufrirían más daños.

Además, existe otro tipo de calzado no recomendado en el auto que nombraremos a continuación:

Chanclas o sandalias

Con este tipo de calzado podemos tener más de un disgusto. El tacto del pedal no es el adecuado, el pie se puede resbalar y va completamente suelto.

Tacones

Hay muchas mujeres amantes del riesgo que conducen con tacones. Es una verdadera locura puesto que el tacón se puede quedar enredado con la alfombrilla y evita que reaccionemos a tiempo ante cualquier imprevisto.

Lo mejor es llevar un calzado plano de repuesto para intercambiarlo y conducir de forma más segura.

Botas de montaña

Es un calzado perfecto para sujetar bien el pie pero el tacto del pedal es irreconocible con este calzado tan específico. Y es que las botas de montaña son rígidas y suelen tener una suela lo suficientemente gruesa como para resultar incómodas en la conducción. De hecho, como su propio nombre indica, son perfectas para la montaña, pero no para conducir.

Botas altas

Es otro calzado muy habitual en mujeres. Es indiferente que tengan tacón o no lo tengan porque ambas opciones no son recomendables para la conducción dada su rigidez.

Como verán, es complicado encontrar unos zapatos para el coche que resulten cómodos y seguros al mismo tiempo. En cualquiera de los casos, evitemos conducir con chanclas o conducir con sandalias así como conducir con tacones. Guardemos un par de zapatos en el maletero de nuestro carro que nos sirvan de sustitutos para cuando calcemos zapatos no recomendados para conducir.

¿Qué tipo de calzado no está permitido para conducir?

No hay ninguna norma que prohíba llevar calzado de seguridad mientras se conduce. Sin embargo, está prohibido conducir con un calzado que restrinja de algún modo los movimientos. Debe llevar zapatos que no resbalen, que no aprieten, que no tengan adornos que puedan desprenderse y que no sean demasiado pesados.

¿Cómo manejar un auto con tacones?

Evite los tacones finos o de aguja, porque cuanto más finos son, más inestables resultan al montar; en este caso, es aconsejable un tacón más grueso. Los zapatos demasiado puntiagudos tampoco son adecuados porque dificultan el pedaleo.

¿Qué pasa si conduzco con sandalias?

Las consecuencias son las mismas: corres el riesgo de provocar un accidente y poner en peligro tu seguridad y la de los demás.

¿Por qué? Las chanclas pueden engancharse en el suelo del coche y bloquear los pedales.

¿Por qué es peligroso manejar con chanclas?

Llevar chanclas puede dificultar pisar bien el pedal del acelerador o del freno, lo que puede provocar un accidente grave. Además, reduce la maniobrabilidad, afecta a la libertad de movimientos y aumenta el tiempo de reacción en caso de incidentes imprevistos.