Wiesmann Thunderball: Una joya de fin de semana

Wiesmann Thunderball 1

El renombrado fabricante alemán de deportivos vuelve con fuerza al mercado con su última creación: el Wiesmann Thunderball, un emocionante roadster eléctrico diseñado para disfrutar en los momentos de ocio. Para tener una idea de su calidad, tuvimos la oportunidad de poner a prueba este roadster de dos plazas tras ponernos al volante de uno de los modelos anteriores de este pequeño especialista alemán, el MF5, equipado con uno de los mejores motores jamás fabricados, el impresionante V8 biturbo de 547 CV de origen BMW. Incluso con esa referencia tan alta, el Thunderball eléctrico logró cautivarnos y estimular nuestros sentidos.

Anunciado como el primer roadster eléctrico de lujo en el mundo, es una reinterpretación moderna de la fórmula clásica: te sientas bajo y cerca de la parte trasera, con el viento acariciando tu cabello y una sonrisa dibujada en tu rostro. Disfrutas de la precisión de la dirección y la respuesta instantánea del acelerador, gracias a sus 671 CV y 811 Nm de torque entregados a través de las ruedas traseras, con la ayuda de un diferencial de deslizamiento limitado mecánico.

La suspensión delantera de doble horquilla y la trasera de múltiples brazos garantizan un comportamiento ágil y preciso. A pesar de su potencia, no es un vehículo pesado, gracias al uso extensivo de fibra de carbono en su construcción. La distribución de peso es casi perfecta, con una proporción clásica de 50:50, y su centro de gravedad es bajo a pesar de no ser un chasis tipo monoplaza, lo que mantendría los asientos a una altura incómoda. La batería, con una capacidad neta de 83 kWh, tiene una forma en T. Gracias a su eficiencia de aproximadamente 5 kilómetros por kWh, ofrece una autonomía impresionante de 500 kilómetros.

Wiesmann Thunderball

Lo más destacado de esta experiencia de conducción es que el Thunderball es un juguete de fin de semana para los afortunados adinerados, pero también un excelente vehículo eléctrico que puede ser apreciado por otros.

El Thunderball cuenta con dos motores eléctricos, ambos ubicados en la parte trasera, y una transmisión de una sola velocidad. Sin embargo, a diferencia de muchos vehículos eléctricos convencionales, el Thunderball incorpora un sistema de frenado regenerativo de cinco niveles que permite al conductor tener un mayor control y compromiso.

Mediante las levas detrás del volante, se puede ajustar la intensidad de frenado, la leva derecha reduce la presión mientras que la leva izquierda libera la presión. Puede sonar inusual, pero su funcionamiento es excelente.

La empresa ha experimentado altibajos en el pasado, pero ahora, con sede en Londres y bajo la dirección de Roheen Berry, un exitoso empresario y apasionado entusiasta de Wiesmann, está resurgiendo con una propuesta emocionante y única en el mercado.

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