Fallas por lubricación en el motor

Los elementos móviles del motor son metálicos y cuando se someten a fricción generan altas temperaturas, lo que hace necesario mantenerlas bien lubricadas para evitar desgaste excesivo, las altas temperaturas pueden fusionar las piezas de tal forma que se puede bloquear el motor.

El aceite varía con la temperatura, debido a esto se vienen usando para el automóvil aceites multigrados, los cuales se comportan de la forma adecuada así se encuentre en alta temperatura en el verano o en baja temperatura durante el invierno.

La lubricación cumple con las siguientes funciones en el motor

• Forma una película entre las piezas móviles disminuyendo la fricción
• Enfriar el motor retirando el calor de las piezas móviles
• Genera un sello junto con los anillos para mantener la compresión

Acciones que pueden generar fallas en el sistema de lubricación

No revisar periódicamente el nivel de aceite del motor: se debe revisar de forma periódica el nivel de aceite del motor. Se recomienda revisarlo en la mañana antes de encender el vehículo, se puede tomar un paño limpio, se saca la varilla de medición, se limpia, se introduce nuevamente, para tomar la medición más exacta, es ideal en este momento que el aceite aun no se ha salpicado ni está circulando por el sistema. El nivel debe ser el adecuado, no puede estar por debajo ni por encima. El nivel bajo de aceite genera pérdidas en la presión lo que ocasiona que las piezas no logren lubricarse de la forma adecuada. Si el nivel es alto genera problemas de estanqueidad y llevará a que se dañen los sellos y juntas. Cuando se encienda el testigo del aceite que se relaciona a continuación se debe detener inmediatamente el vehículo, para evitar daños irreparables en el motor.

Sobre revolucionar el vehículo en frio: es una mala práctica que tienen algunas personas en las mañanas al encender el auto y en los semáforos. Al acelerar el auto en vacío en las mañanas es perjudicial ya que en ese instante no se ha lubricado completamente el sistema, el aceite se encuentra más viscoso y tardara mas en llegar a las partes más altas, esto reduce la película antifricción que cumple el lubricante, puede generar daños irreparables en los pistones, camisas y cojinetes. El manejo agresivo (alta velocidad, aceleración rápida, detención brusca) daña las partes internas del motor y genera consumo excesivo de combustible.

No cambiar el aceite o utilizar lubricantes de baja calidad: el aceite se degrada con el tiempo y el uso. Una de las razones es la presencia de contaminantes como combustible quemado o suciedad, estos deben ser combatidos por los aditivos del aceite, neutralizados químicamente o evitando que se aglomeren estos lodos generan daños en el motor. El cambio de aceite debe realizarse de acuerdo con la ficha técnica del vehículo, cada 5.000, 8.000 o 10.000 kilómetros. Recuerde que con el paso del tiempo el aceite pierde sus propiedades.

Un lubricante de baja calidad puede presentar problemas de temperatura, viscosidad excesiva, o falta de viscosidad, se recomiendan aceites que cumplan con la norma API-SG o superior.

Tener fugas de aceite: los daños en algunos de los retenedores o juntas del motor pueden producir fugas, un nivel inadecuado de aceite puede generar fugas, es tan perjudicial tener un nivel bajo de aceite como tenerlo por encima del nivel.  Las juntas se cristalizan por los cambios de temperatura, se deben sustituir las juntas de acuerdo a los manuales de servicio o si están presentando fuga. Un poro o una fisura en el Carter puede generar fugas de aceite, un tapón de aceite que no presenta sello. Se debe tener muy en cuenta si existen charcos de aceite donde estacionamos el auto.

Uso excesivo de aditivos: no se debe aplicar ningún aditivo al aceite, el aceite multigrado trae los aditivos necesarios. El mezclar el aceite con aditivos puede generar daños en el motor, las mezclas que se obtienen no son homogéneas ni equilibradas y pueden generar efectos negativos.

5 fallas básicas del sistema de lubricación

Veamos las fallas, causas y soluciones del sistema de lubricación:

Consumo excesivo de aceite

Sin embargo, los motores de combustión interna presentan diferencias muy grandes en el consumo de aceite entre los distintos tipos de motor e incluso dentro del mismo tipo de motor. El tipo de curva de consumo de aceite en función del tiempo o del kilometraje depende de varios factores, como el uso del motor, el tipo de segmentos, pistones, cojinetes y el estado del motor. En general, sin embargo, puede decirse que el consumo de aceite de un motor nuevo es relativamente alto al principio y disminuye gradualmente con el desgaste, hasta que finalmente la curva de consumo se vuelve más o menos constante. En el caso de los motores de cuatro tiempos, la cifra se sitúa en torno al 1% del consumo de combustible, mientras que en los motores de dos tiempos ya es ligeramente superior.

Desgaste excesivo de piezas

Es importante entender que es prácticamente imposible evitar el desgaste de estos componentes y la única solución es ralentizarlo al máximo. El desgaste mecánico asociado al movimiento del pistón y los segmentos sobre las paredes/capas del cilindro se debe tanto al contacto metálico entre las piezas móviles como a la deposición de materiales abrasivos entre estas superficies. A bajas velocidades del pistón, la película de aceite que separa el pistón de las paredes del cilindro está sujeta a la formación de grietas. Por lo tanto, el desgaste mecánico es inevitable hacia el final de la carrera y es más grave en la parte superior del cilindro, donde la temperatura y la presión del gas son más altas. Los cuerpos extraños y las sustancias que se forman en la cámara de combustión pueden actuar como abrasivos y destruir la película de aceite. Basándose en estas consideraciones, las siguientes son las posibles causas del desgaste anormal de estos componentes:

• Insuficiente aceite en el cilindro / lubricación de la camisa.
• Desalineación del pistón / deformación del cilindro, lo que provoca la pérdida de adherencia de los segmentos al pistón.
• Contaminación por aceite debido a la abrasión.
• Los anillos no cierran el paso del gas (reventón).
• La temperatura de la pared del cilindro y de la camisa es demasiado alta, lo que provoca la formación de grietas en la película de aceite.
• Aceite lubricante con una viscosidad inferior a la especificada.

Formación de depósitos

Grandes cantidades de hollín y otros productos de combustión incompletos entran en el cárter, circulan y forman depósitos o residuos. Las bajas temperaturas de funcionamiento y la insuficiente ventilación del cárter son las principales causas de la formación de estos depósitos. Las sustancias insolubles se acumulan en los segmentos del pistón, los cilindros, los vástagos y los asientos de las válvulas, formando depósitos compactos. La adherencia del anillo del pistón depende principalmente de la tasa de acumulación de productos de combustión incompletos y de la oxidación del aceite en las ranuras del anillo. Si estos depósitos se acumulan más rápido de lo que pueden ser eliminados por la circulación del aceite, el fallo del anillo es inevitable. Para mantener los pistones, los segmentos, las superficies de fricción y otros componentes del motor prácticamente libres de depósitos, se requiere una dispersión adecuada del aceite, así como una elevada estabilidad a la oxidación.

Cambio en la presión del aceite

La viscosidad es la única propiedad del aceite de motor que puede influir en la presión del aceite. Sin embargo, si el motor está en buenas condiciones mecánicas, el efecto sobre la presión del motor será mínimo. Sin embargo, si la presión reacciona a los cambios en los valores SAE, esto indica que el motor necesita mantenimiento mecánico. Esto se aplica a las temperaturas normales de funcionamiento, ya que las fluctuaciones de la presión del aceite son posibles a temperaturas extremas. Una baja temperatura del motor conduce a una alta presión del aceite y viceversa. Una causa común de la baja presión del aceite es la dilución excesiva por combustible. A continuación se enumeran las posibles causas de una presión de aceite anormal:

Baja presión del aceite

• Aceite diluido con combustible.
• Consumo excesivo.
• Muy poco aceite.
• Viscosidad del aceite insuficiente.
• Bomba de aceite defectuosa.
• Muelle de la válvula de seguridad defectuoso.
• Filtro de aspiración de la bomba de aceite obstruido.
• Drenar la línea de presión de la bomba de aceite.
• La temperatura del aceite es demasiado alta.
• Espuma excesiva.
• Sensor de presión de aceite defectuoso.

Consejos de mantenimiento del sistema de lubricación del vehículo

Como ya se ha mencionado, el sistema de lubricación de los motores de combustión interna es de suma importancia. El funcionamiento y el rendimiento de un motor de automóvil dependen en gran medida de una lubricación adecuada. Por lo tanto, es importante seguir algunos consejos para mantener el sistema de lubricación interna

Averías en el sistema de lubricación:  Soluciones

Mantenimiento regular: En primer lugar, hay que mantener el aceite del coche según las recomendaciones del fabricante, que se encuentran en el manual técnico del coche. El manual indica la frecuencia con la que deben cambiarse el aceite y el filtro y el aceite que debe utilizarse. El cambio de aceite es un procedimiento de mantenimiento muy sencillo que cualquiera puede realizar con un embudo. En otras palabras, no es necesario llevar el coche al taller.

Compruebe el nivel de aceite: Otro consejo importante es comprobar el nivel de aceite del motor de vez en cuando (idealmente cada vez que conduzca el coche) para saber lo antes posible cuándo necesita un cambio de aceite. Comprobar el nivel de aceite es un procedimiento sencillo.

Lubricantes aprobados y recomendados: Siempre es aconsejable utilizar lubricantes aprobados y recomendados por el fabricante. Los lubricantes no se eligen al azar o por interés propio, es decir, no todos los lubricantes son adecuados. De hecho, si se utiliza un lubricante distinto al recomendado, el rendimiento del motor será inferior al esperado e incluso puede dañarlo. Por ello, merece la pena comprobar el tipo de lubricante utilizado en el coche, aunque no sea el más barato.

Cambiar el filtro: También es importante cambiar el filtro de aceite en cada cambio de aceite. Esto evita que la suciedad y los residuos se acumulen en el filtro.