Cómo mejorar el rendimiento del combustible

Aunque el precio del petróleo ha bajado, con el precio de los combustibles no sucede lo mismo. La mejor forma de cuidar el bolsillo es incrementar el rendimiento y la eficiencia, optimizar el funcionamiento para lograr un mayor ahorro en el gasto de combustible.

Rendimiento del combustible

Para mejorar el rendimiento del consumo de combustible es importante tomar conciencia y mejorar los hábitos al volante e invertir en un mantenimiento adecuado del automotor para sacar el mayor provecho de este para así reducir el consumo.

Para lograr un mejor rendimiento en el consumo de combustible vamos a tener en cuenta dos aspectos: cambio de hábitos al volante y un mantenimiento adecuado del automotor.

Hábitos al volante

Para lograr un rendimiento óptimo de combustible debemos cambiar hábitos al volante que nos llevan a un mayor consumo de combustible. Tenga en cuenta los siguientes consejos para lograr un funcionamiento óptimo reduciendo el consumo de combustible.

1.      Planificar la ruta

Un viaje bien planeado, donde se  tenga en cuenta el trazado de la ruta, las paradas facilita la llegada al destino de una forma rápida y segura, reduciendo el consumo de combustible.

2.      Comprobar la presión de aire en las llantas

Las llantas o neumáticos debe ir a la presión indicada por el fabricante y debe ser acorde a las condiciones del clima y el terreno. Además de cuidar nuestra seguridad nos permitirá una conducción más eficiente. Conducir con una presión inadecuada aumenta el consumo de combustible hasta en un 4%.  (véase también: ¿Cuál es la presión adecuada de las llantas?)

3.      Reducir cargas innecesarias

Debemos racionalizar el volumen  y la distribución de la carga, no solo por cuestiones de espacio, conducir con un peso innecesario a bordo hace que el consumo de combustible aumente de forma proporcional al aumento del peso de la carga.  Dependiendo del tamaño del auto y el peso puede aumentar el consumo de combustible hasta en un 6%.

4.      Arranque  y puesta en marcha

Arranque el motor sin pisar el acelerador (en los motores de gasolina puedes iniciar la marcha inmediatamente después del arranque; en los motores diésel, debe esperar unos segundos antes de comenzar a moverse).

Comience a conducir lentamente (20 km/h en 5 segundos para ahorrar un 11 por ciento de combustible) y evita acelerar bruscamente.

Use la primera marcha solo para el inicio. Cambie a segunda velocidad a los 2 segundos o 6 metros aproximadamente.

5.      Velocidad uniforme

Mantenga la velocidad lo más uniforme posible, busque  fluidez en la circulación, evitando frenadas, aceleraciones y cambios de marcha innecesarios. Para desacelerar, levante el pie del acelerador y deje rodar el vehículo con la marcha puesta en ese instante. Frene de forma suave con el pedal del freno y reduzca de marcha lo más tarde posible, con especial atención a las bajadas.

Circulando a más de unos 20 km/h con una marcha insertada, si no pisa el acelerador, el consumo de carburante es nulo. En cambio, a ralentí, el auto consume entre 0,5 y 0,7 litros/hora.

6.      Uso racional del aire acondicionado

En la ciudad transitar con los vidrios abiertos (siempre que sea seguro) es más eficiente que utilizar el aire acondicionado. Sin embargo, ocurre lo contrario cuando se conduce a más velocidad, debido a la mayor resistencia del aire.

Cuando la temperatura exterior es de 25º C, el aire acondicionado reduce el consumo de gasolina en un 12 por ciento. Utilice el aire acondicionado únicamente  cuando sea necesario.

7.      Uso del freno de motor

Suelte el acelerador cuando anticipe que debe frenar, de esta forma se detiene el suministro de combustible, este ahorro en la presión sobre el pedal del acelerador ahorra hasta un 2% del consumo.

Conserve siempre la distancia de seguridad adecuada y un campo visual que le permita ver dos o tres vehículos  para anticipar cualquier situación.

8.      Uso de los cambios

Optimice al máximo el cambio de marchas, tenga en cuenta circular el mayor tiempo posible  en las relaciones de transmisión largas (4, 5 o 6) siempre que sea posible, respetando los límites de velocidad.

El par motor de un auto diésel aconseja cambiar de marcha entre las 1.500 y 2.500 rpm. En caso de los gasolina el momento óptimo se sitúa entre 2.000 y 2.500 rpm. Si su auto no dispone de tacómetro o cuentarrevoluciones, la velocidad puede servir de referencia (cada 20km/h).

9.      Motor inactivo

En paradas prolongadas, es recomendable apagar el motor. Un motor al ralentí durante 10 minutos (en punto muerto y con el aire acondicionado desconectado) consume 0,13 l/100 km de gasolina.

10.     Aproveche las bajadas

Los descensos permiten aprovecharlos para ahorrar en el consumo de gasolina. Aproveche la inercia para adelantar el cambio de marchas circulando a bajas revoluciones.

En las subidas, retrase al máximo reducir de marcha, incrementando la presión sobre el acelerador, aunque nunca pisando el pedal a fondo.

11.     Repostar antes de que el combustible se agote

Con el tiempo, la suciedad y los residuos pueden acumularse en la parte inferior del depósito de combustible, perjudicando el ahorro de combustible del vehículo. Llenar al menos un cuarto (¼) del depósito reduce la posibilidad de que los "lodos" afecten al sistema de combustible o al motor. Además, la gasolina es la que refrigera la bomba.

12.     Use un aditivo de combustible

Independientemente de la marca de gasolina, el octanaje o el tipo de combustible (E85, diésel, gasolina, etc.), su vehículo desarrollará depósitos con el tiempo. Estos depósitos pueden obstruir los inyectores de combustible y causar corrosión con el tiempo, lo que resulta en una combustión menos eficiente del combustible que entra en la cámara de combustión. Un limpiador completo del sistema de combustible elimina los depósitos de carbón y evita que se sigan acumulando, restaurando el rendimiento del vehículo y mejorando la eficiencia del combustible después de repostar.

Los aditivos para combustible mantienen limpios los inyectores y las válvulas y prolongan su vida útil, mejoran la experiencia de conducción, protegen todo el sistema de la corrosión y reducen el consumo de combustible. También mejoran el rendimiento del motor, ahorrando hasta un 3% de combustible y reduciendo las emisiones al medio ambiente. Con la adición de estos productos cada aproximadamente 5000 kilómetros o según lo recomiende el fabricante del producto, el vehículo emite menos monóxido de carbono, ya que la combustión interna se produce de forma más natural. Un sistema de motor limpio garantiza un mejor rendimiento, una buena combustión y una mayor vida útil.

13.     Evite el ralentí excesivo

Esto es especialmente importante en los meses de invierno y verano. Estar al ralentí durante más de 30 minutos no sólo supone un gasto de combustible, sino que también aumenta las emisiones de gases de efecto invernadero. Algunos vehículos antiguos necesitan estar al ralentí durante más tiempo cuando hace frío, pero procure no hacerlo durante más de unos minutos.

14.     Cambiar a aceite de motor sintético

Utilizar aceite sintético en lugar de aceite de motor convencional tiene varias ventajas. Una de las ventajas es que las pruebas demuestran que el aceite de motor sintético mejora la eficiencia del combustible del vehículo. Otras ventajas son la mejora del rendimiento del motor a temperaturas extremadamente cálidas o frías y extender los intervalos de cambio de aceite. Consulte el manual del propietario de su coche o consulte a un técnico profesional para saber si el aceite sintético es el más adecuado para su vehículo.

15.     Usa tu control de crucero

Utilice el control de crucero en la carretera siempre que sea posible. El control de crucero ahorra combustible al mantener una velocidad constante del vehículo. Sin embargo, no utilice el control de crucero cuando conduzca cuesta arriba.

16.     Modificar el coche para que consuma menos combustible

Neumáticos ecológicos

Los neumáticos verdes tienen una menor resistencia a la rodadura, lo que significa que el motor tiene que trabajar menos para empujar el coche y el consumo de combustible se reduce. Están disponibles en casi todos los talleres y cuestan menos que los neumáticos convencionales. La mayoría ofrece una buena tracción y puede reducir el consumo de combustible hasta 0,3 l/100 km.

Reprogramación electrónica

Se trata de reprogramar la unidad de control electrónico del motor, que se encarga de controlar la inyección de combustible y el sistema de encendido. Normalmente, el sistema de inyección de combustible se modifica para que consuma menos combustible o se ajusta la respuesta del motor para que funcione más intensamente a bajas velocidades, por ejemplo, para que requiera menos aceleración y consuma menos combustible.

También se puede conseguir una pequeña reducción del consumo de combustible aumentando la potencia. Por razones de fiabilidad, no es aconsejable aumentar la potencia en más de 30 CV, ya que esto reduciría la carga del motor para el mismo rendimiento. Esto debe hacerse en centros de reprogramación especializados. Esto es muy práctico si su motor está equipado con un turbocompresor, ya que el ahorro de combustible es de entre el 4 y el 7%.  Por otro lado, no afecta necesariamente a la fiabilidad y es una modificación casi imperceptible.

Controlador de presión del turbo

El turbocompresor es un dispositivo que proporciona un suministro de aire auxiliar a las cámaras de combustión. Lo hace en el rango de presión correcto y se utiliza principalmente en los motores diesel. La presión en el turbocompresor se controla mediante la válvula wastegate.

Es aconsejable mantener la presión de diseño que este componente transmite al motor. Una presión insuficiente puede provocar una combustión incompleta y reducir la vida útil del motor. Para mejorar el rendimiento de un motor con turbocompresor, es aconsejable :

  • Poner en marcha el motor, prestando mucha atención a la presión de la turbina.
  • Conduzca dentro de la velocidad del motor especificada.
  • No acelere cuando el motor esté frío. Deje que el motor alcance la temperatura de funcionamiento para que esté suficientemente lubricado.
  • Deje que el sistema turbo se enfríe durante unos minutos antes de estacionar el vehículo.
  • Realice un mantenimiento adecuado para comprobar si hay desgaste, fugas u obstrucciones. Todos estos factores conducen a una reducción de la presión y, en consecuencia, de la potencia necesaria.

Mantenimiento adecuado del automotor

Un plan de mantenimiento adecuado, donde interviene el cambio de aceites, líquidos y filtros es ideal para conservar el motor en óptimas condiciones de funcionamiento. Un motor en buenas condiciones ahorra combustible, tenga en cuenta los siguientes consejos de mantenimiento para reducir aún más el rendimiento de la gasolina.

Mantenimiento adecuado del sistema de combustible

Es conveniente realizar un mantenimiento adecuado al sistema de combustible, para aumentar el rendimiento en el consumo le recomendamos tener en cuenta lo siguiente:

  • Realice una limpieza adecuada al tanque de combustible
  • Revise el filtro de la bomba de combustible, en caso que este muy sucio sustitúyalo
  • Cambie periódicamente filtros de aire y combustible (según fabricante y uso)
  • Revise el funcionamiento y estado de las bujías y cables de alta
  • Realice el cambio de combustible en estaciones de servicio nuevas y de marcas reconocidas.
  • Revise el funcionamiento y estado de los inyectores, en caso de obstrucciones realice un lavado o sustitución de los mismos.

Una vez realizados todos estos controles: lavado de tanque de combustible, cambio de filtros, realice una mezcla proporcional entre gasolina corriente y extra, empezando con una relación 20% extra y 80% corriente, incrementando de forma proporcional hasta llegar a un 50/50, para lograr un mayor desempeño del motor y una ahorro progresivo en el consumo de combustible. Esta operación debe hacerla por lo menos dos veces al año para mejorar el resultado.

¿Cuántos kilómetros rinde un litro de gasolina?

Independientemente del tipo de vehículo, del tamaño del motor y de si es de gasóleo o de gasolina, calcular el kilometraje por litro de gasolina es bastante sencillo. No puedes saber exactamente cuántos kilómetros de gasolina recorre tu coche, pero puedes calcular una ecuación para obtener una cifra aproximada. Es muy sencillo y lo explicamos con detalle:

En primer lugar, es aconsejable repostar gasolina para poder hacer el cálculo con números cerrados. A continuación, registra la distancia recorrida, utilizando el cuentakilómetros del coche, que debe ponerse a cero antes de salir. Una vez que llegue a su destino, compruebe la distancia recorrida y el nivel de combustible restante. Anota todos los datos y realiza la siguiente operación matemática: divide los kilómetros recorridos entre los litros y multiplícalos por 100.

La cifra obtenida refleja el rendimiento del coche en un día medio a velocidad constante. Por ejemplo, si se recorren 500 kilómetros con un depósito de 50 litros, el cálculo es el siguiente: 500/50= 10, es decir, el coche ha recorrido 10 kilómetros con un litro de gasolina. 

Si quiere saber cuántos kilómetros de gasolina se han consumido en función del volumen del depósito, basta con dividir los litros consumidos entre los kilómetros recorridos. En el ejemplo anterior, el proceso es el siguiente: 50/500= 0,1. Esto significa que se utilizan 100 ml de gasolina por cada kilómetro recorrido. Además, puede multiplicar este valor por 100 para obtener el consumo de combustible por 100 kilómetros, es decir, 10 litros por 100 kilómetros.

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